Hace veinte años tenía que confesar (con cierto apuro) que no había estado en Pamplona ni en Sanfermines (salvo una vez, unas horas, de paso). Los y las compañeras de la Universidad Pública de Navarra se encargaron de solucionarlo (no lo de los Sanfermines, claro), mostrándome su buen trabajo y capacidad organizativa y confiando en que yo pudiera aportar algo al suyo (que ya era mucho confiar). Gracias al Instituto Gerónimo de Uztariz todo ha sido más sencillo y de media ando por ahí cada cuatro años por un asunto o por otro. Es una suerte y un placer.
Martí Marín Corbera
Profesor titular de historia contemporánea
Universidad Autónoma de Barcelona